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Ver todas las noticiasMaison Cana, la casa salesiana para los menores huérfanos en Rukago (Burundi)
El nuevo edificio del orfanato Maison Cana, en la localidad burundesa de Rukago, ha cumplido el primer año desde su inauguración. Gestionado por la Congregación de las Hijas de María, fundada en 1994 por el misionero salesiano Vital Minani, la obra acoge a medio centenar de menores huérfanos. La joven congregación, conocida como Nuestra Señora de Caná, les ofrece los cuidados que necesitan en un ambiente familiar.
El edificio es una amplia estructura de dos pisos cuyos trabajos se iniciaron en 2012. El primer piso se construyó en varias fases gracias a la disponibilidad de fondos donados por varios benefactores, principalmente por la Congregación Salesiana. El segundo piso, en cambio, se levantó gracias a las donaciones de la Fundación Formons une Famille (Formemos una Familia) de Quebec (Canadá).
El ambiente festivo del día de su inauguración aún se recuerda en la nueva obra salesiana. En aquella ocasión, las calles de la localidad estaban adornadas por guirnaldas y fue el propio don Vital Minani quien bendijo el edificio.
El hogar es un refugio en donde los jóvenes huérfanos son y se sienten amados
El día de la inauguración la iglesia parroquial de la vecina obra salesiana celebró la Eucaristía de acción de gracias. En ella se destacó la ayuda de la Congregación y de los ambientes salesianos de todo el mundo para lograr que el edificio fuera completado.
Después de la misa tuvo lugar la brillante inauguración abierta con danzas populares a ritmo de tambores. La clausura del acto fue el tradicional corte de la cinta por parte de Ignace Ntawembarira, delegado del Ministerio de los Derechos Humanos, Asuntos Sociales y de Género de Burundi.
Las diversas autoridades y benefactores del orfanato destacaron que es “una inspiración de Dios” y felicitaron a las Hijas de María “por su espíritu de compasión y su noble apostolado”.
El representante del Gobierno de Burundi donó a los niños una tonelada de arroz de parte de su Ministerio. En su discurso destacó que este orfanato de los Salesianos “ofrece a los menores una verdadera familia, educación, cuidado, amor y orientación para ayudarlos a volverse buenos ciudadanos en Burundi”.
