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Ver todas las noticiasAyuda a 2.500 familias en Siria para proporcionar educación a los menores y mitigar las consecuencias de la pandemia
Siria no supera los 6.000 contagios por coronavirus desde que comenzó la pandemia, pero las consecuencias del confinamiento, y sobre todo de la guerra, tienen sumida a la población en una situación de vulnerabilidad y pobreza extremas. El conflicto armado, que dura ya casi diez años, ha reducido la población de 21 a 16 millones de personas. Cinco millones de personas se han refugiado en Líbano, Turquía y Jordania y hay más de seis millones de desplazados internos. Ante esta situación, en la que dos de cada cinco escuelas están inutilizadas y más de dos millones de niños y niñas no pueden ir a la escuela, los misioneros salesianos en Siria continúan volcados en la educación de los menores y en la ayuda a sus familias.
El 83% de la población siria vivía bajo el umbral de la pobreza con menos de 1,5 euros al día en marzo de 2019. Un año después, al conocerse el primer caso de contagio por coronavirus, los precios aumentaron hasta un 75%. Desde ese momento, la grave crisis económica de Líbano ha supuesto también más desempleo. Además, la devaluación de la moneda en Siria y las sanciones impuestas por Estados Unidos implican el bloqueo del país, mientras las familias se debaten entre poder pagar la educación de sus hijos o poder darles de comer.
Ante esta situación, nos hemos propuesto reducir la vulnerabilidad de la población más necesitada y hemos puesto en marcha un proyecto para ayudar a 2.500 familias de Alepo, Damasco y Kafroun. Siempre hemos estado al lado de la población pero ahora, además, podemos proporcionar educación a sus hijos e hijas gracias al proyecto en el que participa Misiones Salesianas.
Los objetivos del proyecto son ofrecer una escolarización segura a niños y niñas en los centros de Don Bosco en Siria; proporcionar alimentos y ayuda básica de emergencia a las familias en los centros salesianos y apoyar a los alumnos de los últimos cursos de Secundaria para poder sacar adelante sus exámenes finales.
La guerra y la pandemia han dejado sin escuela a miles de niños y niñas en Siria
Los centros salesianos de Alepo, Damasco y Kafroun acogerán a los niños, niñas y jóvenes de entre 7 y 17 años. Allí recibirán educación extraescolar y de recuperación durante 10 meses para cubrir sus lagunas educativas debidas al confinamiento.
Las familias más necesitadas recibirán ayuda de dinero en efectivo, alimentos y asistencia para cubrir sus necesidades básicas. Los misioneros salesianos estudiaremos la situación de cada familia para establecer las ayudas que necesitan.
Los alumnos de los últimos cursos de Secundaria recibirán clases de apoyo grupales durante todo el año para la preparación de los exámenes de acceso a la universidad. El proyecto incluye los equipos y el material de papelería escolar necesarios para los estudios.
Los misioneros salesianos y los educadores nos aseguraremos de que cada beneficiario obtenga el apoyo educativo necesario para continuar con sus estudios. A la vez, el proyecto permitirá mitigar el impacto de la crisis financiera, de la pandemia y de la guerra que vive el país. De esta manera, los padres también podrán motivar y ayudar a sus hijos en el proceso educativo al tener las necesidades básicas cubiertas. Los misioneros salesianos en Siria seguimos unidos en favor de los más desfavorecidos.
