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Ver todas las noticiasEl sueño misionero sigue haciéndose realidad en Islas Salomón: nueva escuela primaria San Juan Bosco
Hasta el pasado mes de octubre Islas Salomón estaba libre de coronavirus. Ese mes se reportó el primer contagio de un estudiante que había regresado de Filipinas, pero la vida diaria se ha desarrollado con normalidad durante todo este último año, aunque con preocupación por la situación de la pandemia en el resto del mundo. En este tiempo, una de las mejores noticias salesianas allí ha sido la inauguración de una escuela primaria que lleva el nombre de Don Bosco.
En Gizo, capital de la Provincia de Nueva Georgia (Islas Salomón), el año pasado decidieron invertir en el futuro de las nuevas generaciones. A pesar de la preocupación por la situación de pandemia mundial, la educación siguió ocupando un lugar preferente en sus vidas. Hace unos meses, y con la presencia del obispo de la diócesis, el salesiano monseñor Luciano Capelli, se inauguró la nueva escuela primaria San Juan Bosco.
La nueva escuela está situada en la cima de la colina conocida localmente como Punto Millonario, rebautizada con el nombre cristiano de Nusa-Bosco. Nusa en el idioma local significa “Isla” y Bosco rinde homenaje al santo de los jóvenes.
A la ceremonia asistieron los 205 estudiantes que se beneficiarán de la escuela junto a sus padres
Los nuevos alumnos del centro salesiano pertenecen a diversas comunidades situadas en la zona más afectada por el tsunami de 2007, en el oeste de la ciudad de Gizo. En su mayoría provienen de Nusabaruku, una aldea de pescadores desde donde tienen que desplazarse en barco para llegar a la ciudad.
La construcción de la escuela fue realizada por varios antiguos alumnos de las escuelas católicas locales, educados por los numerosos voluntarios que han trabajado durante los últimos 13 años en el programa de reconstrucción de la diócesis de Gizo tras el terremoto y el tsunami de 2007.
Las seis aulas y el salón multiusos fueron utilizados desde el primer día, al igual que las tres casas para el personal docente de la escuela. El proyecto también incluye un sendero cementado para facilitar el acceso a la escuela, evitando que los niños se lesionaran o se hundieran en las zonas pantanosas que suelen crearse.
“Estamos agradecidos a Dios por este regalo dado a estos 205 niños, que se sienten unidos en su tarea de convertirse en buenos cristianos y honrados ciudadanos de las Islas Salomón”, dijo monseñor Capelli en la inauguración. “Probablemente no veamos los frutos de la educación que estamos plantando ahora, pero serán los hijos de estos niños los que las reciban”, aseguró.
