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23 febrero, 2018

El nuevo futuro de Edmond al salir de la cárcel de menores de Sierra Leona

Edmond Foday es un adolescente que tiene muchas cosas en común con cientos de menores en Sierra Leona a los que las circunstancias los han llevado a vivir en la calle y a sobrevivir de la delincuencia. Sin embargo, Edmond se encontró con la ONG Free Minor Africa, que lo ayudó y recurrió a Don Bosco Fambul para que pudiera tratarse de un serio problema de salud y tenga un futuro lejos de la cárcel.

Edmond Foday era el hijo mayor de una familia con escasos recursos que tuvo que ser criado por su abuela en una aldea. Sólo fue a la escuela hasta el nivel 6 y en ese momento, hace tres años, decidió viajar a Freetown, Sierra Leona, para vivir con otro de sus parientes. Sin embargo, acabó en la calle tratando de sobrevivir y se vio involucrado en un problema con la ley por el que fue condenado a tres meses de prisión en la cárcel de menores.

Hasta en eso tuvo ‘suerte’ el pequeño Edmond, en primer lugar porque no fue enviado a Pademba Road, la cárcel de adultos en la que numerosos menores comparten celda con los adultos y sufren todo tipo de abusos y, en segundo lugar, porque dio con la ONG Free Minor Africa, que el fotoperiodista Fernando Moleres fundó tras conocer ‘in situ’ esas atrocidades y dedicarse a salvar de la cárcel a esos menores y a darles educación.

La semana pasada el propio Fernando Moleres contactó con los Salesianos en Sierra Leona para intentar salvar a Edmond del problema de salud que presentaba: iba a ser puesto en libertad antes de tiempo porque entró en la cárcel de menores con un problema en el brazo que parece serio a juzgar por las fotos y las autoridades temían que empeorara allí dentro.

La familia pidió que el joven regresara a su aldea porque creían que era un hechizo y el curandero de la tribu lo curaría del mal de ojo, pero el temor de los educadores es que le cortaran el brazo por la superstición y la brujería y la losa de la desgracia cayera para siempre sobre el menor.

Al día siguiente de plantear la situación a Don Bosco Fambul un trabajador social recogió a Edmond y lo llevó al hospital militar, donde lo atendió el doctor Songu, gran amigo de los Salesianos. El chico ahora está en buenas manos gracias a su encuentro con personas que han querido salvar su vida y que junto a los Salesianos se encargarán ahora de su recuperación y de la futura reintegración con su familia sin que abandone los estudios.

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