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Ver todas las noticiasUna oportunidad para los refugiados en Etiopía
Nyanthjay tiene 22 años y cuida de cuatro niñas. Dos son sus hijas y las otras dos son de su hermana que no pudo salir del Sudán del Sur. “Lo único que quería era llevar a las niñas a un sitio seguro. Sin guerra ni hambre”, explica. Nyanthajay es una de las 17.000 personas de Sudán del Sur que viven en el campo de refugiados de Nguenyyiel, en la región de Gambella al oeste de Etiopía.
La protección y la educación de los niños, niñas y jóvenes refugiados son objetivos claros en el proyecto que los misioneros salesianos llevan a cabo en este país. En el campo de refugiados han abierto un centro juvenil donde los menores encuentran un espacio para sus juegos, pero también se han puesto en marcha cursos de capacitación en carpintería, construcción, sastrería y peluquería. Más de 140 jóvenes del campamento se han formado gracias a ellos.
Una vez más, los misioneros salesianos abren nuevas oportunidades de futuro a los jóvenes a través de su formación para la reinserción en el mundo laboral. “De hecho, algunos de esos 140 jóvenes ya se han organizado para abrir sus pequeños negocios y empezar a ganar algo de dinero”, explican los misioneros.
