Noticias
Ver todas las noticiasLos misioneros salesianos dan un futuro mejor a más de 100 menores en Madagascar
Los misioneros salesianos en Madagascar se enfrentan cada día a la miseria y la pobreza de un país donde el 60% de su población tiene menos de 25 años. Un ejemplo de servicio y atención en el Centro Notre Dame Clairvaus en Antanarivo, donde alrededor de 100 menores han encontrado un hogar.
Heritiana, Charles y Haia son tres menores que tienen en común su difícil pasado en las calles de Antananarivo, capital de Madagascar, y un nuevo futuro que se abre en el Centro Notre Dame Clairvaux de los misioneros salesianos.
El centro es el hogar para más de un centenar de niños de entre 13 y 18 años. Menores que han vivido en la calle, que han sido abandonados por sus familias, niños que debido a la pobreza escaparon de sus hogares para ganarse la vida…
Los Salesianos les ofrecen la oportunidad que nunca tuvieron: un lugar seguro donde crecer, personas que les quieren y les escuchan y educación y formación para poder tener un futuro esperanzador.
Heritiana ha elegido ser albañil, “porque quiero construir esa casa que nunca tuve”. Haia estudia en el taller de ebanistería y Charles ha optado por el taller de mecánica. “Nos centramos en dar a los chavales una educación práctica de calidad que les ayude a tener una vida mejor en el futuro cercano”, explica el obispo Rosario Vella, salesiano que trabaja en Madagascar desde 1981. “Creemos que garantizar la educación de los niños, niñas y jóvenes es la única manera de sacar adelante este país”, añade Vella.