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Ver todas las noticiasLa ayuda a Nepal empieza a dar frutos
Desde 1992 los misioneros salesianos están presentes en Nepal. Primero en la ciudad de Dharan, al este del país, luego llegaron a Katmandú, más tarde a Chakkarghatty y en 2017 a Biratnagar. El momento más difícil, sin duda, el terremoto que en 2015 devastó la capital, dejó más 8.800 fallecidos, casas, escuelas y hospitales derruidos.
La ayuda a Nepal llega a más de 1.500 niños, niñas y jóvenes que van a volver a la escuela en los próximos meses. Tendrán la oportunidad de estrenar sus nuevas aulas, pupitres y pizarras. Y todo esto cuando la presencia de los Salesianos en este país asiático cumple un cuarto de siglo. Veinticinco años que nos hablan de educación y servicio a aquellos que más lo necesitan.
La ayuda a Nepal por parte de los misioneros fue desde el primer momento. Se pusieron manos a la obra y llevaron alimentos y productos de primera necesidad, en muchos casos, fueron los primero en hacerlo y ahora trabajan duro por la reconstrucción del país. Hoy, hay más de diez escuelas en pueblos y pequeña aldeas del valle de Katmandú que están siendo construidas y equipadas. Misiones Salesianas, por ejemplo, vamos a aportar el equipamiento de las diez escuelas, a construir saneamientos y puntos de agua potable y a apoyar la formación de los profesores para que la educación sea de calidad.
La ayuda a Nepal da paso a la reconstrucción y la actividad de los misioneros con cuatros escuelas, dos escuelas técnicas, cuatro internados y programas de becas, “va a ayudarnos a mostrar que nuestra presencia es importante para el país y para las personas, sobre todo, para los niños, niñas y jóvenes”, explica el director de los Salesianos en Nepal, padre Augusty.
Desde aquí, ¡Felicidades por esos 25 años!