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7 febrero, 2025

La inseguridad domina la ciudad de Goma (RD Congo) a pesar del alto el fuego decretado tras la invasión del M23

El alto el fuego decretado por el grupo rebelde M23 el pasado lunes en la ciudad de Goma, una semana después de la invasión, apenas ha servido para recoger cadáveres de las calles y poner cifras a la tragedia. La ONU estima que al menos 3.000 personas han fallecido y la inseguridad es el día a día de la población. El gobierno interino instaurado obliga a recuperar la normalidad en mercados y escuelas. Los misioneros salesianos se encuentran bien, tratando de organizar la ayuda para la población desplazada que atienden, y tan sólo el centro profesional Don Bosco ITIG ha sufrido daños por balas y la destrucción del aula de informática por una bomba.

La ciudad de Goma, tomada por el ejército rebelde del M23 el pasado 27 de enero, continúa viviendo “un estado de excepción, sin colegios, sin seguridad, sin aeropuerto y la gente vive con miedo e incertidumbre”, explican los misioneros salesianos. “Estamos bien y no hemos sufrido daños, pero seguimos a la espera de los acontecimientos y vivimos una gran incertidumbre, ya que se oye que este alto el fuego no es más una parada estratégica”, añaden.

Desde 2022 el conflicto ha obligado a más de un millón de personas a abandonar sus hogares y ha causado un desastre humanitario en una región devastada por un conflicto que dura ya más de 30 años. En la actualidad, después de una semana de intensos combates, el grupo rebelde M23 instauró instaurado un gobierno interino y ha solicitado que se reinicien las actividades cotidianas y que la ciudad vuelva a recuperar la vida normal.

El Gobierno congolés aún no ha ofrecido datos oficiales, pero la cifra de muertes puede superar las 5.000 personas. De momento, la estimación de la ONU cifra en al menos 3.000 las personas fallecidas, a las que hay que sumar centenares de heridas y miles de personas que abandonaron sus hogares para salvar sus vidas. “El escenario vivido en Goma fue aterrador, balas y detonaciones de armas se oyeron durante días por toda la ciudad”, añaden los misioneros salesianos.

Los Salesianos están preparados para acoger a menores perdidos no acompañados o huérfanos

Los misioneros salesianos trabajan en Goma desde 1981 y cuentan con centros de formación profesional, escuelas y un centro de acogida para niños y niñas en situación de vulnerabilidad. Además, atienden a más de 30.000 personas desplazadas que se encuentran Don Bosco Ngangi y a los desplazados de los asentamientos de Rusayo y Kanyaruchinya.

El alto el fuego representa una esperanza para la población, aunque existe el peligro de que muchos menores desplazados sufran abusos. “El centro Don Bosco Ngangi está preparado para recibir a menores no acompañados, bien porque se han perdido o por el fallecimiento de sus padres”, explican los misioneros salesianos. Un proyecto de atención de emergencia tratará de hacer llegar la ayuda de primera necesidad cuanto antes.

Desde el pasado sábado “recuperamos la electricidad e internet”, comentan los Salesianos. “Se reiniciaron también algunas actividades en la ciudad”. La más relevante fue la apertura del mercado de Kituko y la de algunos almacenes. Sin embargo, la inseguridad hace que los casos de pillaje en busca de comida sean frecuentes. Las oficinas administrativas del gobierno continúan cerradas, al igual que los bancos y las escuelas. Debido al alto el fuego, la Universidad de Goma está convocando a los estudiantes para retomar las clases cuanto antes, mientras que el M23 parece que ha detenido su avance hacia Bukavu y los rebeldes han manifestado que no tienen intención de tomar está ciudad.

Las comunidades salesianas se encuentran bien, pero hay instalaciones que han sufrido daños. Así, “las aulas del Centro Profesional Don Bosco ITIG han sido impactadas por balas que han hecho agujeros en los techos. Además, el laboratorio de informática fue destruido por una bomba. No hay techo ni ordenadores”, alertan los misioneros. “El barrio donde nos encontramos, cerca del aeropuerto, ha sufrido intensos combates estos días”, añaden.

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