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Ver todas las noticias‘PizzOratorio’, el creativo proyecto de reinserción de jóvenes a través del aprendizaje de un oficio
El imaginativo proyecto en la ciudad italiana de Torre Annunziata, convertido en un taller para pizzeros que lleva el nombre de Mani in Pasta (manos en la masa), servirá para enseñar un oficio a todos los jóvenes que en la vida atravesaron por graves problemas y que en algún momento llegaron a casas-familia y a los oratorios salesianos. La oportunidad de salir adelante se produce en una ciudad que forma parte de la historia de la pizza al haber entrado en el ‘Libro Guinness de los Récords’ por haber horneado 10.893 pizzas en apenas 14 horas.
Acompañar a los jóvenes que atraviesan por situaciones personales difíciles, dedicándoles atención, tiempo para estudiar y el entretenimiento, además de enseñarles un oficio que los aleje de los problemas con la ley y les dé un futuro estable son los objetivos de la exitosa iniciativa que comenzó a funcionar hace mes y medio en Italia y que se conoce como PizzOratorio. Un lugar de encuentro, ganar confianza y elevar la autoestima de quienes probaron muchas opciones en la vida y siempre se sintieron perdedores.
El salesiano responsable del proyecto, Antonio Carbone, explica que el PizzOratorio está destinado, en primer lugar, “a una treintena de jóvenes de entre 14 y 21 años, ya huéspedes de las dos comunidades Mamma Matilde y Peppino Brancati, pero que a medida que pase el tiempo se ampliará su radio de acción a los jóvenes que frecuentan diariamente el oratorio buscando oportunidades de formación laboral y de un futuro que hasta ahora se les ha negado”.
Para hacer realidad el PizzOratorio fue fundamental la colaboración que ofrecieron algunas pizzerías de la ciudad, de manera desinteresada.
Los establecimientos hosteleros de Torre Annunziata tuvieron en cuenta el objetivo principal que persiguen los Salesianos, la inserción laboral de los jóvenes, además de la contribución económica a las instituciones salesianas para desarrollar nuevos proyectos en favor de la juventud más vulnerable.
El espacio destinado al proyecto tiene alrededor de 60 metros cuadrados y está ubicado en el oratorio salesiano y cuenta con un moderno horno en el centro. “Nos encontramos en un territorio en donde hay muchos problemas y con difíciles perspectivas de trabajo y empeño. Cada día tenemos como objetivo rescatar a los jóvenes que están en la calle. Los queremos salvar de los clanes gracias a este taller de cocina que les enseñará a cocinar y a hornear pizzas. Y con esta cualificación profesional podrán encontrar un trabajo honesto”, concluye el salesiano.
