Dos iniciativas solidarias salesianas en Uruguay para acoger a menores y a personas en situación de calle

La Casa Valdocco tiene como objetivo principal que los niñas y niñas estén en ella el menor tiempo posible para garantizarles su derecho a vivir en familia. El proyecto se enmarca en la Red de Obras Sociales Salesianas de la Fundación Trampolín, y será llevado adelante por un grupo de laicos y laicas salesianos acompañados por 25 técnicos en diversas disciplinas que atenderán a 35 menores.

Este hogar trabajará 24 horas al día con los niños y niñas para que sean protegidos, cuidados, atendidos y promovidos en el ejercicio de sus derechos con el objetivo de fortalecer sus vínculos familiares cuando se hayan debilitado.

En la inauguración de la Casa Valdocco, el inspector de los Salesianos, Alfonso Bauer, centró su intervención en dos palabras: gracias y oportunidad. Comentó que desde hacía dos años los Salesianos, junto con el Equipo de Obras Sociales, venían discerniendo la posibilidad de este proyecto como respuesta a la necesidad de acompañamiento especial, con la mediación de un hogar, que percibían en muchos niños y niñas a los que acompañan en los centros juveniles y clubes de niños en el país sudamericano.

Inspirado en el primer oratorio salesiano de Don Bosco, en la Casa Valdocco “los menores se sentirán amados, acompañados y valorados”, aseguró. Se trata de “ponerlos a ellos en el centro de todas nuestras preocupaciones y efectuar el acompañamiento para reintegrarlos a la sociedad”, destacó Bauer.

Dos proyectos de acogida, solidaridad y familiaridad para menores y personas sin hogar en Uruguay

Por su parte, el Parador Nocturno del Colegio Salesiano Pío IX de Montevideo es el primero que se abre como fruto de la coordinación del Ministerio de Desarrollo Social (MIDES) con una organización de la sociedad civil. Esta organización no es otra que La Olla de Villa Colón, una iniciativa de un grupo de jóvenes del Movimiento Juvenil Salesiano para ofrecer alimento a las personas en situación de calle.

La Olla de Villa Colón nació hace cinco años como iniciativa para ayudar a quienes se encuentran en situación de calle en los barrios Colón y Villa Colón. El objetivo del grupo reside en cultivar vínculos cercanos y constantes con las personas en situación de calle que contribuyan a dignificarlas, acercándose a ellas a través de un servicio esencial como lo es el alimento.

Desde el primer día, cada viernes por la noche, de marzo a diciembre, los jóvenes preparan un buen plato de comida y salen al encuentro de quienes viven en la calle. La comida es una excusa para ir construyendo lazos y poder no sólo acompañarlos y escucharlos, sino sobre todo prestarles otro tipo de ayudas. Este año, por ejemplo, los llevaron a vacunarse contra el coronavirus, y propiciaron otros encuentros más asiduos, como ver juntos los partidos de la selección y compartir un plato de comida para irlos preparando para esta nueva propuesta.

La comunidad salesiana del colegio ha destinado fondos para acondicionar el edificio de acogida que cuenta con camas, mantas, abrigos y un detalle que no pasó inadvertido, y es que cada cama tiene el nombre de la persona que la ocupará.