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Ver todas las noticiasDaniel y Jean Claude, dos historias de acogida, esperanza y reunificación familiar para los niños de la calle en RD Congo
El Centro Don Bosco de Bukavu acoge a un grupo de 60 menores rescatados de vivir en la calle y que residen en el internado de los Salesianos. Desde 2019 forman parte de un proyecto de tres años desarrollado por los misioneros salesianos. El objetivo es acoger, educar y reunificar con sus familias a 20 menores del total de 60 que estaban en situación de calle y que atiende en la actualidad el Centro Don Bosco.
Uno de los menores acogidos es Daniel, que vivía con su familia en Goma. Era un niño cuando los rebeldes del M23 ocuparon la ciudad en noviembre de 2012 y en la huida con su familia Daniel se perdió. Buscó a sus padres por todas partes, pero no los encontró. Llegó en barco a Bukavu y, sin conocer a nadie, se encontró con los chicos de la calle.
Para sobrevivir llevaba basura y buscaba piezas de hierro para venderlas a los comerciantes de metal. Pero un día su destino cambió cuando un amigo le dijo que el Centro Don Bosco acogía a los chicos de la calle. Lo acompañó y Daniel fue aceptado.
Con los Salesianos Daniel fue incluido en un ciclo de alfabetización y recuperación escolar. Fue tan buena su trayectoria que en noviembre de 2019 comenzó la formación profesional en carpintería. Daniel se adaptó y mostró su deseo de abandonar para siempre la calle. Mientras, los trabajadores sociales del centro salesiano nunca dejaron de buscar a sus padres, y al final los encontraron: habían emigrado a Kenia.
Millones de menores en el mundo sobreviven en las calles en grupos y sin higiene ni comida
El joven fue acogido con gran alegría por sus padres y sus hermanos después de siete años. Daniel quería seguir estudiando y fue a la casa salesiana en Nairobi. En ella, el director de la Ciudad de los Muchachos de Don Bosco aceptó incluir a Daniel en el curso de carpintería para que continuara sus estudios.
Otro joven con una infancia muy difícil es Jean-Claude. Nació en 2003 y cuando tenía siete años se iba de casa y estaba fuera varios días. Huérfano de madre y con un padre sin trabajo, también se perdió en la calle y no supo regresar a casa. Fue recibido en el centro Don Bosco después de pasar más de siete años en la calle. Recientemente, gracias a los misioneros salesianos y al compromiso de muchas personas, ha podido reunificarse a su familia.
Jean-Claude recuerda que lo llevaron a diferentes centros pero que no se adaptaba y los abandonaba siempre. Dejó hasta de pensar en reencontrarse con su familia. Sin embargo, cuando llegó al Centro Don Bosco de Bukavu comenzó su recuperación personal y escolar.
Los menores tienen un hogar, comida y educación mientras se busca a sus familias
Los misioneros salesianos y los trabajadores sociales no dejaron de buscar a sus familiares y después de la cuarentena por la pandemia, el pasado agosto, los encontraron. Jean-Claude vive ahora con un primo que es como su hermano mayor, y sigue estudiando con muy buenas notas. Al igual que los demás menores reintegrados con sus familias, ambos recibieron en su despedida en el Centro Don Bosco un kit de reencuentro: una bolsa con ropa (pantalones, zapatos, camisetas…), cepillo de dientes y pasta de dientes, crema, sábanas, mantas, un colchón y una cama. La reunificación en ambos casos terminó después de varias etapas de apoyo y preparación para los menores, así como visitas y coloquios con la familia. Además del acompañamiento en el Centro Don Bosco, en la actualidad se realiza un seguimiento mensual para conocer cómo van en los estudios y el estado de la convivencia familiar.