Noticias
Ver todas las noticiasDos jóvenes desvinculadas del conflicto armado en Colombia se gradúan como enfermeras gracias a Don Bosco
Catalina y Claudia participaron en el documental de Misiones Salesianas ‘Alto el fuego’. Hace tres años estaban inmersos en un proceso que les había cambiado la vida y tenían un sueño que cumplir: habían dejado la guerrilla y querían estudiar y ser profesionales gracias a Ciudad Don Bosco-Medellín. Ahora no sólo se han graduado como auxiliares de Enfermería, sino que son dos líderes antes decenas de menores que quieren la paz y volver a estudiar para tener un futuro lleno de oportunidades.
Catalina tiene 21 años y lleva desde los 16 unida a Ciudad Don Bosco-Medellín. Decidió irse con la guerrilla por los malos tratos y abusos que sufría en casa, pero pronto se dio cuenta de que empuñar un arma, vivir en la selva y estar lejos de su familia era aún peor, así que no paró hasta que pudo escapar.
Claudia también tiene 21 y lleva desde 2015 participando en el programa de los Salesianos para menores desvinculados del conflicto armado. De tener que estar sin comer, andando por la montaña varios días y “tratándonos peor que a animales”, ha pasado a sentir el cariño de una familia y compartir su crecimiento personas junto a otros adolescentes y jóvenes.
Ambas se han convertido en líderes y referencia para otros jóvenes que tampoco tuvieron niñez. Con esfuerzo y sacrificio han perseguido su sueño en los últimos años y lo han conseguido: son profesionales y ayudarán a otras personas en el ámbito de la salud.
Catalina siempre tuvo claro que quería ser enfermera porque cuando estuvo en la guerrilla realizó algunos cursillos y le gustó. Claudia sufrió una experiencia traumática con su padre, “que murió por falta de atención sanitaria”, y por eso quiso convertirse en enfermera para que no volviera a ocurrir algo igual en el lugar donde ella nació.
Gracias al programa de los Salesianos en Ciudad Don Bosco Medellín para menores desvinculados del conflicto armado, centenares de menores han empezado una nueva vida en lo que va de siglo después de superar los traumas, recuperar la autoestima y tener voluntad y espíritu de sacrificio para volver a estudiar. Para todos ellos ahora hay un futuro lleno de oportunidades esperándolos para que hagan realidad sus sueños.