Convenios empresariales para mejorar la formación profesional en países del Sur Global

¿Sabías que casi la mitad de los jóvenes a nivel mundial no saben leer o escribir? Y casi el 15% no tiene trabajo o no estudia… 

La educación y la formación profesional son auténticos motores de cambio capaces de transformar las vidas de todos esos jóvenes de países en vías de desarrollo y mejorar las condiciones de las comunidades más vulnerables. 

En este contexto, los convenios empresariales son clave, puesto que, al unir esfuerzos entre las empresas y organizaciones como MISIONES SALESIANAS para impulsar proyectos de formación profesional, las posibilidades de un cambio real y de impacto aumentan mucho.

Pero, ¿cómo funcionan estos convenios y de qué manera pueden las empresas involucrarse en esta misión?

Qué son los convenios empresariales y cómo funcionan

Los convenios empresariales son acuerdos de colaboración entre una empresa y una Organización No Gubernamental (ONG), como MISIONES SALESIANAS, que tienen como objetivo desarrollar proyectos y actividades de impacto social. 

En el caso de la formación profesional, estos acuerdos de colaboración buscan mejorar las oportunidades educativas y laborales de jóvenes en situación de vulnerabilidad, ofreciéndoles habilidades y conocimientos que les permitan acceder a un empleo digno o emprender sus propios negocios.

¿Cómo funcionan estos convenios?

1. Acuerdo de colaboración. Las empresas y MISIONES SALESIANAS establecen un acuerdo que define los términos de la colaboración, los objetivos del proyecto y las responsabilidades de cada parte. Este acuerdo puede incluir desde la financiación de programas de formación profesional, el apadrinamiento de un centro de FP, la donación de equipamiento y recursos, hasta la participación activa de empleados de la empresa aportando su expertise.
   
2. Desarrollo del proyecto. Una vez establecido el convenio, se inicia la puesta en marcha del proyecto, lo que implica la planificación y ejecución de actividades relativas al contenido de ese proyecto, que pueden abarcar talleres técnicos, capacitación en especialidades (electricidad, carpintería, costura, etc.) o programas de formación para el emprendimiento, por ejemplo. En MISIONES SALESIANAS nos encargamos de gestionar el proyecto en terreno, garantizando que los recursos se utilicen de forma adecuada y que los jóvenes beneficiarios reciban una formación de calidad.
   
3. Seguimiento y evaluación. Los convenios empresariales incluyen mecanismos de seguimiento y evaluación para medir el impacto del proyecto. La empresa recibe informes sobre el desarrollo de las actividades, el número de jóvenes beneficiados y los resultados obtenidos en consonancia con la metodología del Marco Lógico de Proyectos. Este seguimiento además de permitir ajustar las acciones según las necesidades del proyecto, también da a la empresa una visión clara del impacto social de su colaboración.
   
4. Beneficios mutuos. A través de estos convenios, las empresas pueden mejorar su responsabilidad social corporativa, aumentar su impacto social y posicionarse como actores comprometidos con el desarrollo sostenible. Al mismo tiempo, las comunidades vulnerables obtienen recursos y oportunidades que les permiten mejorar su situación y construir un futuro más esperanzador.

Los convenios empresariales son flexibles y se adaptan a las características y objetivos de cada empresa en pro de un cambio a mejor real y duradero.

El rol de la formación profesional en la mejora de comunidades vulnerables

En los países del Sur Global muchos jóvenes carecen de acceso a una educación de calidad que les permita obtener las habilidades necesarias para incorporarse al mercado laboral. 

La falta de oportunidades educativas y de formación profesional perpetúa ciclos de pobreza, desempleo y exclusión social. 

Y en este punto, la formación profesional es la llave que abre la puerta del cambio. 

¿Por qué es tan importante la formación profesional?

1. Generación de empleo digno. La formación profesional da a los jóvenes las competencias y las habilidades técnicas necesarias para acceder a empleos cualificados. Ofrecerles conocimientos en áreas profesionales concretas les facilita mucho el acceso al mundo laboral y les permite generar ingresos para ellos y sus familias.
   
2. Fomento del emprendimiento. La capacitación en habilidades profesionales no sólo prepara a los jóvenes para trabajar por cuenta ajena, sino que también les da las herramientas necesarias para emprender sus propios negocios. Aprender a gestionar un pequeño negocio, conocer las bases de la administración y el marketing, y desarrollar una mentalidad emprendedora son pasos fundamentales para crear empleo y contribuir al desarrollo económico de la comunidad.
   
3. Romper el ciclo de la pobreza. La formación profesional capacita a los jóvenes para valerse por sí mismos y mejorar su calidad de vida. Al obtener un empleo digno o emprender un negocio, pueden invertir en su futuro, acceder a servicios básicos como la educación y la sanidad, y contribuir al bienestar de sus familias y comunidades. Este proceso rompe el ciclo de la pobreza y genera un efecto multiplicador que impacta positivamente en la sociedad.
   
4. Desarrollo de comunidades sostenibles. Las comunidades que cuentan con profesionales capacitados tienen más oportunidades de prosperar. La formación profesional contribuye al desarrollo económico y social, generando empleos locales, impulsando la economía y mejorando la calidad de vida de sus habitantes. Además, al promover habilidades sostenibles, se fomenta un desarrollo que respeta el medio ambiente y se adapta a las necesidades locales.

Los convenios empresariales en formación profesional benefician a los jóvenes que participan en los programas, pero además fortalecen a las comunidades en su conjunto. Así que, invertir en la formación de los jóvenes es invertir en un futuro más justo, inclusivo y sostenible.

Cómo tu empresa puede formar parte de este cambio

Si tu empresa desea contribuir al desarrollo global y mejorar las oportunidades de jóvenes en países en desarrollo, los convenios empresariales con MISIONES SALESIANAS son una excelente vía para lograrlo. 

Existen diferentes formas en las que tu empresa puede involucrarse y marcar esa diferencia tan necesaria:

• Financiación de proyectos. Tu empresa puede colaborar financiando programas de formación profesional en diferentes sectores. Estos programas proporcionan a los jóvenes las habilidades necesarias para acceder al mercado laboral y mejorar sus condiciones de vida.

• Donación de equipamiento y recursos. Muchas veces, la falta de materiales y equipamiento adecuado es un obstáculo para el desarrollo de programas de formación profesional. Tu empresa puede donar herramientas, maquinaria, equipos informáticos y otros recursos que permitan mejorar la calidad de la educación y ofrecer a los jóvenes una formación práctica y actualizada.

• Voluntariado corporativo. Involucrar a tus empleados en actividades de voluntariado es una excelente manera de contribuir a la formación profesional de los jóvenes. En MISIONES SALESIANAS se ofrecen varias opciones de voluntariado corporativo que van desde las asistencias técnicas a distancia hasta la presencia en terreno. 

Los convenios empresariales no tienen por qué limitarse a acciones puntuales. Es posible establecer alianzas a largo plazo con MISIONES SALESIANAS, involucrándose en el desarrollo y expansión de programas de formación profesional. Estas alianzas permiten crear un impacto más profundo y sostenible, generando oportunidades continuas para los jóvenes en situación de vulnerabilidad.

Tienes en tus manos la oportunidad de convertir a tu empresa en un agente de cambio y de contribuir a un mundo más justo a través de la formación profesional. 

Y, sobre todo, para mejorar la vida de miles de jóvenes, impulsar el desarrollo de sus comunidades y fortalecer la responsabilidad social corporativa de tu empresa.

Ponte en contacto con nosotros y vemos juntos como tu empresa puede formar parte de esta misión transformadora. ¡Unidos podemos construir un futuro lleno de oportunidades y esperanza!

¡Únete al cambio!