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Ver todas las noticiasLa fiesta de María Auxiliadora regresa hoy a los patios y a las obras salesianas en todo el mundo
El día 24 de cada mes significa un recuerdo obligatorio a María Auxiliadora, la Virgen de Don Bosco y de los Salesianos, pero el 24 de mayo representa una cita ineludible porque celebramos su fiesta. Hoy, todos los países en los trabajamos los Salesianos se vuelcan en la celebración de su fiesta. Antiguos alumnos, centros escolares y parroquias de todo el mundo vuelven hoy su mirada a la Auxiliadora. Algunas actividades y celebraciones volverán a tener lugar después de que el año pasado la emergencia sanitaria lo impidiera, pero continuarán limitadas en el número y en los aforos debido a la pandemia.
Las actividades escolares, con los juegos salesianos, las eucaristías y las veladas regresarán a los patios salesianos por la fiesta de María Auxiliadora. También lo han hecho este año las novenas, pero lo lo harán, en la mayoría de los casos, las ofrendas florales ni las procesiones. Los límites de aforos y las distancias de seguridad siguen marcando nuestro día a día a medida que la vacunación avanza, por lo que las actividades, celebraciones y hasta las famosas florecillas de la Virgen que proponía Don Bosco en este mayo salesiano podido seguirse compartiendo online.
La devoción a María Auxiliadora, la Virgen de Don Bosco, que tanto propagó el fundador de la Congregación Salesiana gracias a su madre, Mamá Margarita, sigue inquebrantable entre todos los que tienen algún contacto con una obra salesiana. Mamá Margarita le inculcó ese amor y esa devoción por la Virgen en las oraciones y en la vida diaria. Y la Auxiliadora fue, desde el principio, el centro de la gran obra de Don Bosco.
Todo comenzó cuando Don Bosco tenía 9 años. En un sueño vio que la Virgen ya le indicaba su vocación: sería sacerdote. Años más tarde, la Virgen le habló en otro sueño, le dijo que quería ser honrada con el título de “Auxiliadora” y le señaló el lugar para que se construyera en Turín un templo dedicado a Ella, la actual Basílica de María Auxiliadora.
“La Virgen quiere que la honremos con el título de Auxiliadora”, anunció Don Bosco en 1862
Don Bosco comenzó la obra del templo con unas monedas que no alcanzaban a ser ni media lira. Sin embargo, fueron tantos y tan grandes los milagros que María Auxiliadora empezó a realizar que en sólo cuatro años estuvo terminada la Gran Basílica. De hecho, el fundador de los Salesianos solía decir que “cada ladrillo de este templo corresponde a un milagro de la Santísima Virgen”.
El reconocimiento a María Auxiliadora está lleno de curiosidades. Proviene de los primeros cristianos griegos, que la llamaban Virgen María Boetéia, que significa “la que trae auxilio venido del cielo”. A María Auxiliadora se la considera clave en muchas batallas como la de Lepanto o cuando en el siglo XVII los católicos del sur de Alemania se libraron de la invasión de los protestantes.
Otra curiosidad es el porqué de la celebración el 24 mayo. Se debe a que el Papa Pío VII, tras estar preso por Napoleón y gracias a la intervención de la Virgen María, fue liberado. Pío VII llegó a Roma el 24 de mayo y entonces decidió que ese día fuera la fiesta de María Auxiliadora.
Pero la curiosidad más destacada de esta advocación es que María Auxiliadora es la patrona de China. La devoción se remonta a la segunda mitad del siglo XIX. En Shanghai se encuentra el santuario Sheshan, que es un lugar de referencia para venerar a María Auxiliadora. San Juan Bosco fue el impulsor de esta advocación mariana con frases como “No he sido yo, ha sido la Virgen Auxiliadora quien te ha salvado”, o “Todo lo ha hecho Ella”, que la han extendido por todo el mundo.
¡Feliz día de María Auxiliadora!