Cerrar aviso

VAMOS A SUPERARLO JUNTOS. Con tu ayuda conseguitmeos mascarillas FPP2

Dona ahora
11 marzo, 2024

“Estamos viviendo un infierno”, aseguran los misioneros salesianos en Haití en medio de la violencia y el caos

La violencia y las bandas dominan Haití. La situación de inestabilidad que vive el país desde el asesinato del presidente Jovenel Moïse, en 2021, se ha desbordado en estos últimos días cuando el primer ministro, Ariel Henry, anunció su compromiso de celebrar elecciones antes de agosto de 2025. Desde entonces, el asalto a dos prisiones de la capital ha dejado en libertad a más de 3.000 reclusos, tiroteos e intentos de asalto al Palacio Nacional, daños en el aeropuerto y la petición de los líderes de las bandas criminales, exaltos cargos de la Policía, para que el primer ministro, que se encuentra en Puerto Rico y no puede regresar al país, renuncie al poder.

Primero fue el terremoto de 2010, que sumió al país en una pobreza extrema de la que no se ha recuperado. Después, la crisis económica, la imposibilidad de controlar la violencia callejera, el asesinato del presidente y un nuevo terremoto en 2021, lo que unido las tormentas tropicales y a la pandemia han sumido a la población en una situación de urgencia humanitaria continua.

Hace 10 días, el anuncio del primer ministro de la celebración de elecciones antes de agosto del próximo año convirtió al país en un caos absoluto. Las bandas criminales, que dominan todos los barrios de la capital y las comunicaciones en el país, elevaron el nivel de violencia con amenazas de una guerra civil si el primer ministro, que se encuentra en Puerto Rico, no renunciaba al cargo. Los expolicías y exgolpistas que lideran estos grupos criminales iniciaron asaltos a las principales cárceles del país, liberaron a más de 3.500 reclusos y centraron sus ataques en las inmediaciones del Palacio Nacional y el aeropuerto.

“La situación en Haití es caótica. No hay palabras para describirla. Estamos viviendo un infierno”, explican los misioneros salesianos que siguen intentando trabajar en el país y atender en la población tras una oleada de violencia sin precedentes.

El país está a la espera de una misión internacional de seguridad liderada por Kenia

Haití está a la espera del despliegue de una misión internacional de apoyo a la seguridad liderada por Kenia y que en octubre pasado aprobó Naciones Unidas. Mientras tanto, el país sobrevive en medio del colapso institucional, de la incapacidad de la policía y el ejército para hacer frente a las bandas criminales y con una población que no tiene para comer.

“Los Salesianos, de momento, estamos bien, pero no podemos desarrollar ninguna actividad desde el 29 de febrero, cuando se inició esta situación”, añaden los misioneros. Desde entonces, la violencia entre las bandas estalló. “Las bandas están saqueando las comisarías de policía y todo lo que encuentran a su paso, los negocios, los comercios… quieren tomar el Palacio Nacional, el aeropuerto”, explican. 

En la capital, Puerto Príncipe, se suceden los tiroteos entre las bandas y con la policía, y los secuestros están a la orden del día. “Hace unos días secuestraron a tres religiosas que estaban en su casa”, dicen los Salesianos desde Haití. Y los líderes de las bandas amenazan al país con llegar a una “guerra civil” si el actual primer ministro no dimite.

En lo que va de año, más de 1.200 personas han muerto asesinadas en las calles de Haití

Desde enero, más de 1.200 personas han muerto asesinadas, según Naciones Unidas. El país se encuentra al borde del colapso y paralizado, explican las agencias internacionales, y lleva inmerso en una grave crisis política, económica y de seguridad desde el año 2021 cuando el presidente Jovenel Moïse fue asesinado. Las agencias recuerdan que esta inestabilidad ha dejado 300.000 personas desplazadas. 

Las bandas armadas controlan el 80% del territorio de la capital, Puerto Príncipe, los hospitales no tienen capacidad de atender a los heridos, muchos comercios han sido saqueados en las últimas jornadas, y hay cadáveres comenzando a descomponerse en las calles en los alrededores de las cárceles donde se produjo la fuga masiva el sábado pasado.

Los misioneros salesianos trabajan en Haití desde 1935. Nuestras obras educativas se extienden por ocho ciudades del país, desde Cap-Haitien en el norte, pasando por la capital y hasta Les Cayes en el Sur y atienden cada año a más de 22.000 menores y jóvenes en centros escolares, de formación profesional, centros juveniles y hogares de acogida.

El futuro de Haití es complejo. “Vivimos con temor el día a día porque no se sabe lo que puede pasar un minuto después. Esta es nuestra vida en los últimos días, por lo que pedimos oraciones y que no se olviden de nosotros”, finalizan los Salesianos desde la capital de Haití.

Colabora

Quiero colaborar con el trabajo que realiza Misiones Salesianas

50€
100€
150€
Otra cantidad