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Los niños y niñas víctimas de los conflictos armados te necesitan

Alrededor de 470 millones de niños y niñas en el mundo viven en zonas que están en guerra en la actualidad. Eso supone uno de cada seis menores.

Las primeras víctimas de una guerra siempre son los menores.

Menores en medio
de las emergencias

Los niños y niñas afectados por las guerras en emergencias Sudán
Los niños y niñas afectados por las guerras en emergencias Ucrania

Muchos niños y niñas quedan huérfanos, se ven obligados a desplazarse solos, son reclutados para combatir, dejan de ir al colegio, sufren abusos, son víctimas de tráfico o acaban viviendo en la calle…  

Los niños y niñas afectados por las guerras en emergencias Siria

Los misioneros salesianos trabajan en los países en conflicto para proteger y acompañar a los menores en medio de la violencia, ayudar a sus familias, acompañarlos en la superación de los traumas, infundir esperanza y tratar de mantener la educación en una situación de emergencia.

 

La atención a las personas desplazadas en los países en guerra y a las refugiadas en los países limítrofes es otra labor que realizan los misioneros salesianos para garantizar los derechos de los menores y proporcionarles seguridad.

Y esto sólo puede ser posible con tu ayuda

Necesitamos ayuda urgente para afrontar grandes retos

El conflicto en Ucrania, la Franja de Gaza, Sudán, Siria… decenas de conflictos en el mundo, muchos de ellos olvidados, continúan activos en la actualidad: RD Congo, Yemen, Somalia, Sudán del Sur, Burkina, Nigeria, Myanmar… y así hasta más de 30.

Los niños y niñas afectados por las guerras en emergencias RD Congo

RD Congo

Los niños y niñas afectados por las guerras en emergencias Siria

Siria

Los niños y niñas afectados por las guerras en emergencias Sudán

Sudán

Los niños y niñas afectados por las guerras en emergencias Ucrania

Ucrania

Gracias a ti podremos seguir trabajando en los países en conflicto contra el tráfico, la trata de menores y el reclutamiento forzoso, rescatando a menores que sobreviven en las calles y ayudando a las familias ofreciendo espacios seguros y oportunidades de futuro con la educación para los menores.